¿El tabaco también afecta a nuestra actividad cardiaca?

Una de las enfermedades cardiovasculares (ECV) más conocidas es la cardiopatía coronaria, también llamada enfermedad arterial coronaria. Esta se produce por un estrechamiento de las paredes de las arterias que llevan la sangre al corazón, debido a la presencia de placas de ateroma en las mismas.

Pero, ¿tiene esto algo que ver con el consumo de tabaco?

Siempre se denunció que la ingesta de tabaco afectaba considerablemente a la actividad respiratoria, pudiendo incluso desarrollar enfermedades muy dañinas como pueden ser la EPOC o el cáncer de pulmón. Sin embargo, no está tan extendida la idea (y comprobación científica) de que el tabaco también es un factor determinante en el desarrollo de las enfermedades cardíacas.

La realidad es que el tabaco induce el aumento de la producción de triglicéridos, que no son más que un tipo de grasas presentes en nuestro organismo pero que la sangre no quiere en exceso. Además, el tabaco va a reducir el nivel del colesterol HDL, que es una lipoproteína encargada de reducir esta grasa sobrante en la sangre. La transporta al hígado y ahí la desintegra. ¿Que pasa si aumenta el número de triglicéridos y disminuye la cantidad de HDL? Pues que se va a ir acumulando en la sangre hasta que llega un punto en el que las concentraciones son tan altas que sedimentan y forman las placas de ateroma antes mencionadas.

Es decir, el tabaco, al igual que la ingesta excesiva de grasas o azúcares, también puede ser responsable de los accidentes cardíacos (infarto) y cerebrovasculares (ictus) .

Es importante mencionar que las sustancias que contiene el tabaco tienden a volver la sangre más viscosa y pegajosa, por lo que es más fácil que se formen trombos o coágulos que bloqueen el ritmo normal del flujo sanguíneo; aumentando de nuevo el riesgo de infartos. 

Pero ¡OJO! No pienses que por no fumar ya se soluciona el problema. Existen numerosos estudios que demuestran como estas complicaciones también afectan a los fumadores pasivos. El humo de segunda mano, es decir, el humo que proviene del tabaco de otros, causa alrededor de 34.000 muertes prematuras por cardiopatías coronarias al año en EEUU.

"No fumes, pero sobre todo, no perjudiques a tu entorno con tus acciones"